Los analistas del Bank of America (BofA) proyectan que el precio del cobre aumentará por encima de los 10.000 dólares por tonelada para 2025, mientras que predicen que los precios del mineral de hierro caerán por debajo de los 80 dólares por tonelada el mismo año.
Para el cobre, los analistas del Bank of America mantienen una perspectiva positiva y esperan que los precios se mantengan elevados ante posibles recortes de tasas por parte de la Fed.
El precio del cobre se mantiene fuerte debido a la alta demanda, la oferta limitada y la mayor inversión en proyectos de transición energética, afirmó BofA.
“La actividad manufacturera debería estabilizarse a medida que la Fed recorte las tasas, por lo que mantenemos nuestra visión constructiva del cobre hasta 2025”, dijeron los analistas.
Los precios del cobre han aumentado un 6% en lo que va de 2024, impulsados por la escasez de suministro de las minas y los desafíos en la refinación.
Además, el gasto en infraestructura energética (en especial la expansión de la red vinculada a la descarbonización) ha impulsado la demanda. En China, las inversiones en la red han compensado la menor demanda del sector inmobiliario, lo que ha dado un nuevo impulso al cobre.
Por el contrario, el mineral de hierro enfrenta desafíos derivados de la disminución de la demanda, especialmente en el sector inmobiliario de China, donde el consumo cayó del 50% en 2010 al 20% en 2024 debido a las medidas gubernamentales contra las inversiones especulativas y una desaceleración en la construcción de viviendas.
La producción de acero también ha disminuido, y aunque sectores como el de maquinaria han ayudado, no es suficiente para contrarrestar la caída de la construcción, según BofA.