El 16 de octubre Prefectura Naval llevará adelante una inspección técnica en el puerto de Deseado. De superar la instancia, la terminal marítima se convertirá en el punto de ingreso de los insumos que demanda la actividad minera santacruceña. Será el desenlace de un largo trabajo del Gobierno Provincial, las operadoras mineras y gremios, buscando fortalecer la actividad portuaria.
En septiembre de 2018, La Opinión Austral daba cuenta de que la actividad minera debatía el rol de los puertos de la provincia de Santa Cruz, el objetivo a alcanzar era que las importaciones ingresaran a Santa Cruz por las terminales marítimas provinciales.
A casi un año, Marcelo Gordillo, coordinador general de la Unidad Ejecutora Portuaria de la Provincia de Santa Cruz (UNEPOSC) dio a conocer que se encuentran próximos a completar el circuito administrativo para que el puerto de Puerto Deseado se convierta en el punto de carga y descarga de los insumos que demanda la minería. De hecho, al cierre de esta semana se ha confirmado que el 16 de octubre Prefectura Naval Argentina ejecutará una inspección técnica. De superarse la instancia, la terminal marítima quedará legalmente habilitada para operar con material utilizado para las operaciones mineras.
Será el desenlace de un largo trabajo llevado adelante los últimos tres años y que permitirá a Puerto Deseado un mayor movimiento en aquella terminal, “no sólo del sector marítimo, sino de todo el encadenamiento comercial”.
Para alcanzar este punto de equilibrio se debió superar un desacuerdo que los estibadores tuvieron con sus representantes sindicales años atrás, luego se sumó la falta de acuerdo entre esa mano de obra y las operadoras mineras.
Ello generó que las importaciones que demandaron las operaciones mineras asentadas en territorio santacruceño se alternaran entre Chubut y Punta Arenas (Chile) a pesar de que la ecuación no era positiva para ningún sector. Pues, las operadoras veían cómo sus costos se encarecían, mientras que el Estado Provincial no se redituaba de la actividad portuaria ante el fortalecimiento que experimentó la minería en la última década. Se recuerda que la provincia es el territorio de mayor actividad en todo el país, y mientras se discutía el rol de los puertos, se construyeron las minas como Don Nicolás o Cerro Moro. Pues ello habría generado un robustecido movimiento en los puertos con la consecuente generación de mano de obra y cobro de las tasas a favor de Santa Cruz.
Rúbrica
En la edición de Arminera 2019, el Ministerio de la Producción, la Secretaría de Desarrollo Sustentable de la Nación encabezada por Mariano Lamothe, la Secretaría de Minería de Santa Cruz, representantes de UNEPOSC, la Cámara Minera de Santa Cruz (CAMICRUZ), la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), firmaron un acuerdo para las operaciones de ingreso, carga, descarga y transporte terrestre de mercancías peligrosas de la actividad minera que incluye estándares internacionales suscriptos por el ICMI (Internacional Cyanide Management Code).
Marcelo Gordillo, coordinador general UNEPOSC, precisó a La Opinión Austral que “los convenios firmados en mayo pasado en la convención minera de mayor peso del país debieron ser rubricados nuevamente entre las partes, trámite que ha concluido días atrás. Seguidamente, dio cuenta que Prefectura Naval Argentina llevará adelante una inspección técnica el 16 de octubre para luego determinar la habilitación de la terminal marítima para trabajar con el tipo de cargas que demanda la minería”.
Se trata de la readecuación a la Ordenanza Nº 8-98, pues allí se da cuenta que en Argentina rige, a través del dictado de la Ley Nº 24.292, el Convenio Internacional sobre Cooperación, Preparación y Lucha contra la Contaminación por Hidrocarburos, 1990 (OPRC/90). Por ello, UNEPOSC elaboró un plan de contingencia en base al Plan Regulador Nacional para las operaciones de mercancías peligrosas, regidos por una ordenanza marítima que se debió cumplimentar.
Mientras tanto, las operadoras aprovecharon el tiempo para dar cumplimiento a sus compromisos, como los programas de capacitaciones, formación de brigadas en toda la provincia, abastecer el puerto con todos los elementos de protección personal necesarios ante cualquier emergencia.
En declaraciones a este medio, Gordillo aseguró: “se trata básicamente de importaciones, el objetivo es que se haga todo por barco y no vía terrestre como se lo hizo hasta aquí”, “en todo momento se habló de septiembre u octubre. Aún estamos a tiempo”, especificó.
Trabajo en el puerto
En otro orden, el coordinador general UNEPOSC, señaló que las importaciones de la minería son una “instancia positiva” para la actividad portuaria santacruceña. “Agrega trabajo, pues se hizo una labor sostenida para lograr que los molinos eólicos para que desembarquen en Deseado para dos proyectos, ahora esperamos que en octubre haya otro desembarco para un proyecto ubicado en Cañadón León y se haga por Deseado”. “Se suman actividades y esto genera mayor movimiento a camioneros, personal de estiba, activando el circuito comercial y la actividad económica. Pues caso contrario sólo dependemos de la pesca”.
En esta sintonía, indicó que el Ministerio de Producción y el Poder Ejecutivo Provincial llevaron adelante una sostenida labor para activar la actividad portuaria en Santa Cruz. “Todo el insumo de las hidroeléctricas va por Punta Quilla, hace año y medio recibimos un promedio de dos barcos mensuales, maquinaria pesada, complejo habitacional, contenedores, todo se trae por esa vía”, describió y acotó que ello genera “una actividad de hasta 30 camiones diarios que trasladan la mercadería que traen los buques”.
Más adelante, Marcelo Gordillo recordó que la baja temporada, históricamente, generó inconvenientes en Caleta Paula, “ante los conflictos que se repetían una y otra vez, se trabajó desde la Secretaría de Pesca para agregar el procesamiento de materia fresca, y fue un paliativo importante para dar respuesta a la demanda de ocupación. El año pasado, aquel puerto tuvo trabajo casi el año corrido y esto alejó el conflicto, es un trabajo que se hace desde algunos años ya y se aportó el pescado fresco que nos da más mano de obra local”.
Así, el referente de la Unidad Ejecutora Portuaria de la Provincia de Santa Cruz manifestó que “la política implementada ha servido para incrementar la actividad y hay un proceso de inversión destinado a fortalecer toda la infraestructura portuaria”. Señaló que la obra más grande en Punta Quilla, “al inicio demandaba una inversión de 52 millones de pesos, y concluirá por una suma de 90 millones de pesos, debido a la inflación y precio del dólar. Se hace cambio de defensas, viaductos con vinculación al muelle, iluminación, grupo electrógeno, tiene que haber energía para que el puerto trabaje”, destacó.
De esta manera, UNEPOSC aguarda nuevos encuentros con el sector minero santacruceño para iniciar el camino de las importaciones por las terminales marítimas provinciales. Si bien no pueden pronosticar cuál será el beneficio económico, sostienen que se trata de una instancia positiva, ya que generará el fortalecimiento de la actividad portuaria, marcando además el rumbo que debe seguir una actividad como la minería que ha encontrado en Santa Cruz el lugar para desarrollarse, pero generando riqueza a partir del potencial con el que cuenta.
Fuente: La Opinión Austral
Dejar una respuesta