El malestar, por parte de antimineros, se generó porque el miércoles último, en la sesión, el Concejo Deliberante de Andalgalá pasó a archivo el proyecto de ordenanza que planteaba la prohibición de la minería en la zona de Campo Grande, ubicada en el distrito Choya, donde se levanta el proyecto minero de MARA.
La votación fue unánime, lo que demostró un cambio en la actitud de los ediles que responden al intendente Eduardo Córdoba.
El proyecto de ordenanza había sido presentado el 11 de abril de este año por un grupo de vecinos de Choya. Sin embargo, un despacho de la Comisión de Minería y Ambiente no hizo lugar al pedido de los vecinos al sostener que la iniciativa “resulta cuestionable en lo atinente a la constitucionalidad del proyecto conforme a lo señalado por el dictamen de Asesoría del Concejo, que aconsejaba la modificación de algunos artículos por considerarlos inconstitucionales ya que prohíbe la minería.
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Por otra parte, el dictamen de la Comisión consideró que de acuerdo con los informes remitidos por los organismos provinciales, las tareas desarrolladas en la zona de Campo Grande por la empresa MARA no afectaron las condiciones ambientales como citaba el proyecto original.
“No se desprende de la misma que los problemas de agua en el distrito Choya sean consecuencia directa de la actividad supuestamente desplegada en los lechos de los ríos o arroyos por la empresa minera en el mes de marzo o que, cuando aun así hubiera sido, la cuestión ha sido pasajera y el transcurso del tiempo, o ha desvirtuado la afirmación contenida en el principal considerando del proyecto de ordenanza o al menos ha demostrado su temporalidad, ya que a través del tiempo no se han observado nuevos problemas como los denunciados”, fundamenta.
Es por eso que el pase a archivo del proyecto de ordenanza fue aprobado por unanimidad en el pleno del cuerpo.
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